La ciberseguridad, como lo sabe cualquier empresario que cuente con una organización con presencia digital, es de vital importancia para que la operación de una compañía sea una realidad sostenible.
No obstante, cuando un negocio busca integrar a su propio equipo de profesionales en ciberseguridad para que se desempeñen dentro de su empresa, lo normal es que se encuentre con más desafíos de los que imaginaba y con solo un puñado de satisfacciones esporádicas.
Es decir, conseguir que una organización ajena al nicho informático se arme de una plantilla propia en este sentido y que cubra los parámetros de calidad que requiere, debido a su presencia digital, es una labor titánica, quizá no imposible, pero es seguro de que se trata de un movimiento muy costoso y tardado.
Antes de comenzar, es conveniente pensar que la ciberseguridad, especialmente en compañías con alta presencia digital, es un factor que ayuda a que la operación de una organización sea posible y sostenible.
Podemos ver a la ciberseguridad como el aceite que permite girar a los engranajes del negocio en la web, mismo que evita que agentes externos dañen o roben componentes clave de la maquinaria.
Los engranajes de la ciberseguridad son cada vez más grandes y difíciles de mantener, por lo que el perfil requerido para su buen rendimiento es cada vez más especializado.
Cuando una empresa se decide a contratar a su propio personal especializado en ciberseguridad, no pasará mucho tiempo antes de que se percate de que se trata de una tarea complicada, costosa y que tomará mucho tiempo.
En estos días, dada la tendencia casi generalizada hacia la transformación digital empresarial que, además, se ha potenciado por la llegada del coronavirus y la pandemia al mundo, el perfil de los profesionales que requieren muchas compañías ha cambiado.
Esto último es especialmente notable cuando nos referimos a personas altamente calificadas para la ciberseguridad y que también tengan el nivel de experiencia que les permita cubrir las expectativas de los nuevos desafíos del negocio a través de la web.
A pesar de ello, sí existe un camino por el cual se podría intentar integrar un equipo de profesionales de ciberseguridad en una empresa en específico, aunque se trata de una ruta siniestra.
Si buscas que tu negocio cuente, en su nómina, con personal de ciberseguridad, podemos hablar a detalle sobre el tiempo y los recursos que te tomará. Las razones para evaluarlo antes de hacerlo son varias y algunas de las más vistosas son:
Aunque existe una alternativa a todo eso (que veremos un poco más adelante), te corresponde, como empresario, decidir qué camino tomar.
Llegados a este punto, entendemos la necesidad de que una compañía cuente con un equipo de profesionales de ciberseguridad. Sin embargo, también conocemos cuáles son los costos, en términos de tiempo y recursos, de la idea de forzar a que esta plantilla se encuentre dentro de la nómina.
Ahora que, si ya te has topado con problemas al formar un equipo, ya cuentas con él o planeas hacerlo en el futuro, no te preocupes, sea cual sea tu situación, existe una alternativa que puede ayudarte a afrontar de mejor manera todo esto.
Una buena forma de evitar los dolores de cabeza que puede provocar la integración de un equipo de profesionales en ciberseguridad, es simplemente no hacerlo tú mismo, sino dejarlo en manos expertas.
Acercarte a quienes ya lo han hecho y que, para ser precisos, a eso se dedican, por lo que tendrán a la mano no solamente a profesionales altamente calificados en ciberseguridad, sino también con una amplia experiencia que les permita ofrecer las soluciones que realmente necesita tu organización.
Por ser un servicio de pago mensual, conviertes tus gastos de capital en gastos de operaciones, con innumerables beneficios financieros.
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